Un ghost writer, o escritor fantasma, según la traducción literal del inglés, es el profesional que escribe textos y libros, pero que, a causa del tipo de contrato que firma para realizar el trabajo, mantiene su nombre en secreto. En la mayoría de los casos, las obras producidas por un ghost writer son firmadas por las personas o empresas que contrataron los servicios del escritor.

Ese tipo de trabajo suele ser encargado por personas y empresas a las que les gustarían producir libros, artículos, u otro material escrito, pero que no poseen el tiempo o el conocimiento para hacerlo. Por eso, contratan a un profesional. Para conocer más detalles sobre ese tipo de trabajo, el reporterito Daniel de C., 11 años, conversó con Silvia Balieiro, jefa de redacción del periódico TINO Económico (periódico publicado por la editorial Magia de Ler) y ghost writer de algunas obras ya publicadas.

¿Te gusta ser una ghost writer? ¿Qué es lo que más te atrae de ese trabajo?

Me gusta mucho. Estoy graduada en periodismo y descubrí el ghost writing por casualidad, sin pretender hacer eso. Pero me encantó, porque junto mucho de lo que ya hago en periodismo, que es entrevistar y conversar con una persona, pero de una manera más profunda. Porque, para ser ghost writer, necesito tener todas las informaciones del autor para poder colocar eso en su libro, por ejemplo.

 ¿Y qué es lo que menos te gusta?

La parte que menos me gusta es aquello de tener un plazo de entrega. A veces tienes que entregar el trabajo al día siguiente, pero uno cree que, si pudiera entregarlo una semana después, podría trabajar mejor el texto o podría investigar un poco más.

¿Qué tipo de obra te gusta hacer?

Me encanta hacer biografías, que es la persona contando la historia de su vida. A mí siempre me gustó hacer ese tipo de textos porque, cuando haces una biografía, te sumerges en la vida de la persona; son muchas entrevistas, muchas horas de conversación en las que la persona cuenta su infancia, su recuerdo más antiguo, hasta llegar a los días de hoy. También entrevistas a otras personas [para hablar] sobre la que se está haciendo la biografía.

¿Qué te hizo ser una ghost writer?

Fue una invitación que me hicieron para escribir y terminé aceptando. Yo tenía una amiga que trabajaba con un empresario en el área inmobiliaria {área que implica la venta de inmuebles y terrenos]. Él no era brasileño, pero quería mucho contar la historia de la empresa mezclada con su propia historia. Entonces pensé: “¿Sabes qué? ¡Lo voy a hacer!” El libro tardó bastante en estar listo, unos dos años, porque yo tenía otros compromisos. Entonces, él me fue recomendando a otras personas, que me recomendaban para otras, y así comencé a escribir más libros.

 ¿Ya hiciste alguna obra que se hizo muy famosa?

No, nunca hice una obra muy famosa. Pero hay una obra a la que yo le tengo mucho cariño. Fue de un señor que no quiso llevar el libro a las editoriales. Él era un empresario que tuvo mucho éxito, pero que ya se había retirado. Él tenía 94 años y quiso hacer el libro para dar de recuerdo [a los invitados] en su cumpleaños número 95. Nos sumergimos en su historia, fueron diez meses de trabajo oyendo, escribiendo. Fue un libro que me emocionó mucho porque la historia era muy, muy linda de verdad. Eso me hizo sentir realizada por la felicidad de él al tener el libro entre sus manos.

¿Pero, a veces, no te enoja cuando tu nombre no está en un trabajo?

No, inclusive porque ya es lo acordado. Yo no siento el libro como mío, siento que soy como una intermediaria entre la obra que está en la cabeza del autor y el libro escrito. Yo no coloco nada en el libro que sea mi opinión. Todo lo que está en el libro está basado en lo que otras personas dijeron, especialmente el autor. Para que tengas una idea, yo hago esa entrevista, grabo, transcribo palabra por palabra para usar los mismos términos que la persona dice. Y lo que los autores siempre me dicen es: “Increíble, me veo en ese libro. Siento que fui yo quien escribió el libro.” Muchas veces la persona es capaz de escribir, pero no tiene tiempo. O tiene todas las ideas en la cabeza, pero no tiene ese entrenamiento que yo tengo para colocarlas en el papel.

Cuando yo era pequeñito, no me gustaba mucho escribir. Mi mamá me decía que yo tenía unas historias lindas, pero yo no las escribía. Entonces ella me explicó lo que era un ghost writer y yo quise tener uno para mí.

Mira, si quieres, una sugerencia que te puedo dar: graba todas tus historias y después escúchalas. Te van a dar ganas de escribir, vas a decir: “Ah, yo querría tener eso escrito para guardarlo”.

Preguntas

1. ¿Sobre qué fue el primer libro escrito por Silvia?
   a) La vida de un señor muy anciano.
   b) Su propia vida.
   c) Sobre un empresario del área inmobiliaria.
   d) Sobre economía.

2. ¿Te gustaría escribir un libro sobre la historia de la vida de alguien? ¿Por qué?

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