En sociedad con los Escultistas de Brasil, la organización no gubernamental (ONG) Protección Animal Mundial lanzó, en junio, el entrenamiento “Protección de Animales Silvestres”. Para ser reconocidos como especialistas en ese tema y ganar una insignia especial, los escultistas necesitan aprender sobre la importancia de proteger a los animales silvestres que viven sueltos en la naturaleza y movilizar a la comunidad en la que viven.

Para saber más sobre el tema, el lector Flavio C., de 10 años, entrevistó a João Almeida, gerente del entrenamiento en la ONG, y a Rubem Perlingeiro, voluntario del Movimiento de Escultistas desde hace más de 35 años. A continuación, la charla.

¿Cuáles son los principales animales silvestres en extinción?

João Almeida: Nosotros, especialistas en Protección Animal Mundial y en otras organizaciones, decimos que estamos al borde de la sexta extinción de especies en masa en el planeta Tierra. Entonces es complicado decir cuáles son los principales, porque todos están conectados y tienen un papel importante para cumplir en la naturaleza. Sin embargo, para no decepcionarte, algunos ejemplos de animales muy amenazados que puedo nombrar son el bugio marrón y el sauim bicolor, que son tipos de monos, y la tonina, un tipo de delfín.

¿Cómo puede ayudar la tecnología a los animales silvestres?

João: Una forma es con el uso de satélites que monitorean los biomas brasileños. Un bioma es un conjunto de animales y plantas que están adaptados a la geografía y al clima de una cierta región, como Pantanal. Uno de los sistemas que tenemos en Brasil y que usa satélites es el Terra Brasilis del Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE), que permite evaluar la deforestación en tiempo real. La fauna pertenece a la naturaleza y depende de la vida en las florestas para sobrevivir. Sistemas como ese son fundamentales para evitar la deforestación y proteger el medio ambiente y a los animales silvestres.

¿Cómo pueden ayudar los chicos que viven en la ciudad en la protección?

João: Los chicos aman espontáneamente la naturaleza y a los animales, son guardianes de la fauna. Necesitan seguir conversando entre ellos y recordarles a sus padres que ya es tiempo de parar de cortar las florestas, de contaminar los ríos y los océanos; exigir que ellos voten políticos capaces de proteger el medio ambiente; alertar a los mayores que los animales silvestres pertenecen a la naturaleza, y que ellos no deben ser comprados o vendidos ni pueden transformarse en mascotas; que no deben servir para entretenimiento y que la interacción con los animales silvestres solo es válida si es para observarlos en la naturaleza. Que sus pieles, cuero, cuernos o cualquier otra parte no deben ser usados para producir cosas, especialmente artículos de lujo, ni deben servir como remedio. Y que, además de eso, cazar un animal como forma de deporte es algo que no debería existir.

¿Cómo pueden los chicos convertirse en escultistas?

Rubem Perlingeiro: Es necesario tener entre 11 y 14 años, que les guste la naturaleza, buscar un grupo de escultismo, entrar en el grupo y asumir por voluntad propia el compromiso previsto en la Promesa y Ley Escultistas. Sin embargo, a partir de los 6 años y medio, si sabe leer y escribir, un chico o una chica ya pueden ser un lobito o lobita. Y, aunque no haya sido escultista, a partir de los 15 años, cualquier adolescente también puede convertirse en un guía. Existe un programa educativo específico para cada grupo, según la edad.

¿Al hacerse escultista uno ya se convierte en un protector de los animales silvestres?

Rubem: Sí. Uno de los compromisos de la Ley Escultista es justamente conservar el medio ambiente y, específicamente, proteger a los animales – no solo a los silvestres.

¿Cuál es la importancia de la asociación entre los escultistas y la ONG?

Rubem: La asociación llegó en una hora óptima porque la protección de los animales silvestres gana cada vez más importancia. Es fundamental, por ejemplo, que los jóvenes sepan identificar algunas enfermedades en los seres humanos causadas por zoonosis [enfermedades transmisibles por los animales a los seres humanos] provenientes de animales silvestres. Con el comercio de animales silvestres, los seres humanos quedan más expuestos al riesgo de contraer enfermedades zoonóticas como el ébola, la gripe aviar y, ahora, la covid-19.

¿Qué actitudes tienen los escultistas que no tenemos nosotros?

Rubem: El escultista se compromete a ser confiable, preocupado con el prójimo, protector del medio ambiente y atento a su salud física y mental. El escultista no es perfecto, claro, pero tiene siempre en mente esas cualidades como una brújula para orientar su vida y ayudarlo a convertirse en una persona buena y activa, que busca dejar este mundo mejor de lo que lo encontró.

Preguntas
1) ¿Quién puede convertirse en un lobito o lobita?
a) Solo los mayores de 15 años.
b) Cualquier niño o adolescente, de cualquier edad.
c) Personas a partir de 11 años.
d) Niños a partir de 6 años y medio que sepan leer y escribir.

2) ¿En tu día a día, tienes alguna actitud, entre las mencionadas en la entrevista, para ayudar a preservar a los animales silvestres?

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